sábado, 12 de enero de 2013



EL PROBLEMA DEL PECADO

El fracaso de muchos cristianos en su vida de santidad es el no comprender su posición frente al pecado, la mayoría de creyentes resumen su conocimiento del pecado; a la frase “Todos somos pecadores” y eso es lo único que saben, como si la Biblia no tuviera más que decir del creyente frente al pecado, si echamos una ojeada al antiguo testamento, fácil y rápidamente vemos que el titulo de pecador no es para su pueblo; leamos Génesis 13:13 Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra Jehová en gran manera, leamos el Salmo 1:5 Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio, ni los pecadores en la congragación de los justos. Aquí Dios hace la diferencia entre justos y pecadores y en el antiguo testamento cuando Dios se refiere a sus siervos se refiere en términos de justos y no de pecadores, la Biblia dice que Noé era varón justo y no dice que era un pecador, Génesis 6:9 Estas son las generaciones de Noé: Noé varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Dios caminó Noé. Y podríamos citar un sin número de versículos en los que se demuestra que el creyente no es un pecador, basta con buscar la palabra pecador en una concordancia bíblica y verificarlo, basta con buscar la palabra justo y verificarlo. ¿Entonces de donde salió la tradición de decir que todos somos pecadores incluidos los creyentes?, primero que todo de la falsa humildad, en segundo lugar de la ignorancia, por que no conocen bien las escrituras, en tercer lugar de la mala interpretación de la Biblia, en cuarto lugar de la carnalidad de los falsos creyentes para justificar sus malas obras. Pero la Biblia dice en el Nuevo testamento que nosotros somos justos, leamos Romanos 5: 19 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos. La Biblia le da el titulo de justos a los cristianos y no les da el titulo de pecadores, según el versículo anterior vemos que en Cristo somos justos, es por su gracia y su misericordia, ahora leamos 1 de Pedro 4:18 Y: si el justo con dificultad se salva, ¿en dónde aparecerá el impío y el pecador? Este versículo muestra que somos justos y no nos da el titulo de pecadores, porque los justos son los que se salvan y los pecadores se condenan. ¿Entonces porque tanto cristiano anda diciendo que es un pecador? Aunque ya vimos varias razones, sin duda alguna la más grade es la carnalidad y la inmundicia que gobierna a muchos “creyentes”, ellos prefieren estar diciendo que todos somos pecadores para justificar sus pecados, para continuar en su adulterio, fornicación, borracheras, baile, robo y otros más, ellos andan diciendo y enseñando que todos somos pecadores porque ellos cometen pecados de muerte y no quieren que nadie les diga nada en 1 de Juan 5: 16, se menciona el pecado de muerte y el que no es de muerte, estos falsos creyentes no saben que el verdadero creyente aunque tiene pecado no practica el pecado pues 1 de Juan 3: 9 dice: Todo aquel que es nacido de Dios no practica el pecado, por que la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar por que es nacido de Dios. Este versículo jamás será mencionado por alguien carnal, aquí dice claramente que nosotros no practicamos el pecado y si leemos Romanos allí encontramos que nosotros tenemos dominio sobre el pecado veamos Romanos 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estás bajo la ley sino bajo la gracia. Aleluya aquí leemos que el pecado no tiene autoridad sobre nosotros, Cristo y su santidad si tienen poder sobre nosotros. Si nosotros queremos ser verdaderos creyentes entonces debemos escudriñar las escrituras, mirar lo que somos en Cristo, andar en santidad y dejar de estar diciendo lo que no somos, pues en Cristo somos justos y no pecadores, no es orgullo espiritual, es una realidad y si usted no la acepta entonces está rechazando lo que Cristo hizo por usted en la cruz; que fue tomar su pecado para constituirlo en un justo, tenga cuidado con la falsa doctrina del “Cristiano pecador”, porque con esta satanás está llevando a muchos al infierno. Cuando el apóstol Pablo se dirige en sus epístolas a la iglesia no la saluda diciéndoles hermanos pecadores o pecadores arrepentidos, él se dirige en términos de santidad leamos Colosenses 1: 2. A los santos y fieles hermanos en Cristo que están en Colosas: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. ¡Ven! La Biblia nos llama santos y fieles, no podemos justificar el pecado, debemos andar en santidad por que ya no somos pecadores, debemos andar en justicia por que él viene por una iglesia santa y fiel, el no viene por una iglesia pecadora y debemos esperar a aquel que viene pronto, Maranata.




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